El espacio doméstico cobra un nuevo sentido y significado en estos tiempos de incertidumbre, interpelándonos acerca de cómo tejemos nuestra relación con el mismo, convirtiéndose muchas veces en un espacio de extrañamiento incluso para quienes lo habitamos. Casa Tomada, proyecto desarrollado en el último año de la Especialidad de Escultura, propone desarrollar el vínculo entre la construcción de memoria e imagen, estudiando el espacio doméstico como lugar archivo vivo que se nutre de la vida de quienes alberga.
Casa almácigo, abriga y guarece; casa como cuerpo que se afirma viva con el paso de sus habitantes. Mediante la escucha de sus muros y voces que la contienen, el proyecto busca dar cuenta de la memoria silente que la atraviesa, planteando, a su vez, nuevas perspectivas de observar el espacio colectivo que nos contiene, nos rodea y muchas veces, nos precede.
Partiendo de una investigación material y sensorial del espacio doméstico, el conjunto de obras desarrolladas en el marco de Casa Tomada, está basado en una investigación de tratamiento de imágenes análogas, explorando el juego continuo entre la luz y la oscuridad como medios que develan información y memoria del espacio habitado. Oscilando entre el uso de slides, películas radiográficas, pinholes y cuartos rojos de revelado análogo, las piezas han sido diseñadas dentro del campo de la escultura principalmente, teniendo, a su vez, un diálogo expandido con el ámbito de la fotografía y el grabado.